Labor de rescate

En el Santuario Felino estamos motivados por el amor a los felinos y nos dedicamos al salvamento de gatos y gatitos que han sido abandonados, con el fin de mejorar su calidad de vida. Contamos con dos tipos de huéspedes, los Huéspedes Permanentes y los huéspedes Aptos para Adopción.

Los Huéspedes Permanentes suelen ser aquellos de edad avanzada, que necesitan cuidados especiales, o que tienen un fuerte espíritu de manada y sufrirían si se separaran de los amigos que han hecho en el Santuario.

Los Aptos para Adopción generalmente tienen edades desde 2 meses a 4 años de edad, aproximadamente. Los gatos que pueden ser adoptados usualmente son huéspedes recién llegados que no han establecido aún lazos fuertes de pertenencia a la manada, o que no requieren cuidados especiales; así como aquellos sociables con las personas y que muestran más facilidad para adaptarse a los cambios, y gozan de la vida casera.

Cuando vemos, o nos hacen saber, que un gato corre peligro por vivir en las calles, inmediatamente lo rescatamos y llevamos con un médico veterinario para evaluar su condición, pues la mayoría de ellos sufre de desnutrición, así como de pulgas y otros parásitos. Por desgracia, en ocasiones encontramos gatitos heridos y enfermos que requieren de atención médica de urgencia.

Para esta importante labor es importante no vacilar, pues un momento de duda podría hacer que el gato huya y pierda la oportunidad de recibir atención.

En la sección de Historias Reales de Gatitos de esta página encontrarás algunas fotografías de nuestros archivos de rescates; por medio de las cuales podrás apreciar lo importante de la labor de salvamento, pues en ciertos casos, las condiciones en que se han localizado a algunos huéspedes han sido sumamente devastadoras.

Desde el día de su llegada, llevamos a cada nuevo huésped con el médico veterinario, quien los evalúa y desparasita, además de darle seguimiento a todo aquel que llega con alguna enfermedad o herida. Una vez que el veterinario lo indica, el animalito es aseado y lo presentamos a los otros huéspedes del Santuario.

Periódicamente todos son examinados para asegurar que mantienen buena salud, pues entre nuestros huéspedes hay gatitos que llegaron con una enfermedad crónica como el síndrome urológico, u otra. La revisión generalizada nos permite ver que los gatos saludables se mantienen en forma y los que reciben tratamiento llevan una buena calidad de vida. Es importante señalar que en ningún momento los gatitos en tratamiento pueden contagiar a los sanos, pues no padecen nada infeccioso; en los casos en que un recién llegado ha presentado un virus o bacteria, su enfermedad es eliminada por el veterinario antes de ser integrado a la manada. Afortunadamente la atención a tiempo de cada caso nos ha traído finales felices.